Armando Benedetti revela la estrategia del Gobierno Petro tras el golpe al 'decretazo'
El ministro del Interior, Armando Benedetti, reveló que el Gobierno de Gustavo Petro no abandonará su agenda de reformas a pesar de la suspensión del ‘decretazo’ por parte del Consejo de Estado. Afirmó que la estrategia ahora será insistir en las reformas mediante el Congreso y explorar nuevas vías para una consulta popular, incluso después de que esta fue archivada en el Senado. La aprobación de la reforma laboral es, por ahora, el único logro concreto del Ejecutivo en esta ofensiva legislativa.
Bogotá, junio 18 de 2025 – Tras la suspensión provisional del polémico decreto que permitía implementar reformas sin pasar por el Congreso, el ministro del Interior, Armando Benedetti, salió al paso y dejó claro que el Gobierno de Gustavo Petro no se quedará de brazos cruzados.
En declaraciones tras el fallo del Consejo de Estado que frenó el llamado ‘decretazo’, Benedetti explicó que el Ejecutivo ahora apostará con fuerza a sacar adelante las reformas sociales por medio del Congreso y, si es necesario, por vía de una consulta popular directa al pueblo colombiano.
“El fallo es un revés técnico, pero no político. Nuestra agenda de transformación sigue en pie”, afirmó Benedetti en rueda de prensa.
Consulta popular, ¿el nuevo plan A?
Aunque la propuesta de consulta popular fue archivada en el Senado horas después de aprobarse la reforma laboral, Benedetti aseguró que el Gobierno buscará nuevas fórmulas jurídicas y políticas para insistir en este mecanismo participativo. No descartó presentar un nuevo proyecto, esta vez con respaldo de movimientos sociales y ciudadanos.
Reforma laboral: el único respiro
La única victoria de Petro en medio del revés judicial fue la aprobación de la reforma laboral, que incluye:
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Aumento de recargos nocturnos para todas las empresas
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Pago del 100% de domingos y festivos
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Eliminación de contratos por horas
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Contrato laboral para los aprendices del SENA
¿Crisis institucional o pulso democrático?
El choque entre el Consejo de Estado y el Ejecutivo ha encendido las alarmas entre expertos constitucionalistas. Algunos ven una crisis institucional en ascenso, mientras otros señalan que se trata de un necesario contrapeso de poderes en una democracia.
La estrategia del Gobierno, ahora más expuesta que nunca, parece enfocarse en tensar las instituciones para movilizar apoyo popular a sus reformas. El desenlace, aún incierto, podría definir el futuro político del país.